DISCÍPULOS MISIONEROS EN COMUNIÓN CON CRISTO. Primera Comunión. Tema #10

 TEMA #10. EL PERDÓN: ABRAZO AMOROSO DE CRISTO


Llegaremos a la meta: 


Al ir llevando a cabo este encuentro, tú podrás ir comprendiendo: 1) que la Reconciliación es el Sacramento del perdón; 2) que Dios perdona sinceramente al pecador arrepentido; 3) Que para asegurar una buena reconciliación se deben seguir algunos pasos. 

Cantemos al Señor:



Hablemos con Dios:

Padre de bondad, gracias por amarnos y hacernos sentir tus hijos. Gracias por tu Hijo Jesucristo nuestro Maestro. Ayúdanos a comprender hoy el amor tan grande que nos tienes, porque nos perdonas a pesar de nuestras rebeldías y nuestra desobediencia. No permitas que nos alejemos de ti; antes bien, ilumina nuestro entendimiento para que seamos capaces de luchar contra el mal. Amén. 


1. ABRAMOS LOS OJOS:


Lee con mucha atención la siguiente historia:

"La familia de Ramón y de Ana María"

En Cerro Verde vivía una familia muy unida. Ramón y Ana María Rodríguez con sus tres hijos: Clarita, Andrés y Alberto. Todos ayudaban en los oficios de la casa, aunque Alberto siempre buscaba la manera de no hacer nada. Todo iba bien hasta que un día Alberto se peleó con Andrés, porque le dijo que él era un vago y no servía para nada. Como Alberto se enojó tanto, decidió marcharse de la casa. Sus padres, tristes por la ausencia de su hijo, esperaban con gran amor que algún día regresara. 

Alberto en la ciudad buscó trabajo, pero el dinero no le alcanzaba ni para comer. Una tarde mientras descansaba, pensó en su familia y se dijo a a sí mismo: "Andrés tenía razón, no siempre fui responsable; pobres mis viejos, cómo les he hecho sufrir". Esa misma tarde Alberto regresó junto a su familia. Ellos al verlo lo recibieron con alegría, él pidió perdón a sus padres por lo mal que se había portado. 

Andrés se enteró por unos amigos que su hermano había regresado y cómo sus padres lo recibieron. Enojado por la actitud de sus padres volvió a la casa, pero al ver su felicidad comprendió que lo mejor era perdonar todo y volver a ser la familia que siempre habían sido. 

Comparte esta historia con algunos de tus familiares, vecinos y amigos y luego entre todos respondan: 
  • ¿Qué cosas hacen que las personas rompan la unidad y la paz?
  • ¿Cómo se puede volver a recuperar esa unidad y paz?


2. ESCUCHEMOS A DIOS:


Busca en tu Biblia el EVANGELIO DE SAN LUCAS 15, 11-32. Léelo muy detenidamente y luego responde. 
  • ¿Qué le sucedió al Padre de los dos hijos?
  • ¿Qué hizo el hijo menor después de recibir la herencia?
  • ¿Qué le pasó a ese hijo menor?
  • ¿Qué se se dijo a sí mismo el hijo menor cuando se vio perdido?
  • ¿Qué actitud tomó el Padre al verlo a lo lejos?
  • ¿Qué actitud tomó el hijo mayor?
Complementa lo anterior con este vídeo: 




3. GUARDEMOS EN EL CORAZÓN: 


La Reconciliación es un encuentro de amor con el Padre que perdona la ofensa del hijo y prepara una fiesta por su regreso. Es la experiencia de la misericordia de Dios como Padre, quien nos exige un cambio profundo en nuestra vida. Este cambio o conversión nos debe llevar a recibir plenamente el amor de Dios a través del Sacramento del Perdón, instituido por Cristo para borrar todos nuestros pecados. 

Nombre del Sacramento

Este signo de la presencia de Jesucristo resucitado y fuente de perdón y salvación recibe varios nombres: 
  1. Sacramento de Conversión: Porque realiza sacramentalmente la llamada de Jesús al cambio de vida (Mt 1,15). 
  2. Sacramento de la Confesión: Porque el cristiano declara o manifiesta sus pecados a Dios por medio del Sacerdote. Es una autoacusación de sus culpas. A demás porque es una confesión y alabanza de la bondad de Dios para con la persona. 
  3. Sacramento del Perdón: Porque en la absolución sacramental, Dios concede al penitente el perdón y la paz. 
  4. Sacramento de la Penitencia: Porque lleva al cristiano al arrepentimiento a la reparación del mal que ha hecho. 
  5. Sacramento de Reconciliación: Porque otorga al pecador el amor de Dios que restablece la paz, es decir, que recupera la unidad perdida con Dios y con los hermanos. 
El perdón sincero

Cristo instituyó este sacramento del perdón en favor de todos los miembros pecadores de su Iglesia, especialmente para aquellos que después del bautismo han caído nuevamente en el mal y han roto su comunión con Él y con la Iglesia (comunidad). Por eso, a través de la fórmula de la absolución de los pecados, la Iglesia manifiesta la misericordia del Padre que es fuente de todo perdón, y con ella la reconciliación entre los seres humanos y Dios. La fórmula dice:

"Dios Padre de misericordia, que reconcilió consigo al mundo por la muerte y resurrección de su Hijo y derramó el Espíritu Santo para la remisión de los pecados, te conceda por el ministerio de la Iglesia, el perdón y la paz. Y yo te absuelvo de todos tus pecados en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo". 

Indica que el perdón que Cristo nos concede a través de este sacramento es real y sincero. Y aunque se realiza en forma de juicio, el hombre tiene la certeza que está ante un tribunal de Misericordia, donde el juez es Cristo en la persona del Sacerdote. 

Cómo recibir este sacramento

Para recibir este sacramento se aconseja seguir cinco pasos que ayudarán al ser humano a vivir una experiencia de encuentro con el Padre Dios. La parábola del hijo pródigo es un buen recurso para entender cada uno de estos pasos: Dios, como buen Padre, nos da a cada uno una riqueza personal, con la libertad de usarla como cada uno la desee. El hombre como el hijo menor, malgasta la riqueza y poco a poco se aleja de la casa del Padre. 

Cuando la riqueza se acaba y el hambre acosa, el hombre quiere volver a casa; entonces al igual que el hijo pródigo, actúa así: 


Cuando el hombre se arrepiente y confiesa sus errores, el Padre Dios lo recibe con una fiesta, signo de encuentro. Le coloca un nuevo vestido, signo de la nueva vida que empieza. Le regala un anillo, signo de unión y fidelidad; y como si fuera poco le calza los pies con sandalias como signo de seguridad, de certeza de ser su hijo. También nosotros discípulos misioneros de Jesús, al acercarnos al Sacramento del Perdón, debemos recorrer estos pasos para alcanzar una verdadera reconciliación con Dios y con los hermanos a quienes hemos ofendido. 

Termina esta reflexión con este vídeo sobre los cinco pasos para una buena confesión:




4. VIVAMOS CON ALEGRÍA:


De lo visto hasta el momento, vas a sacar tres (3) preguntas, de aquello que no hayas entendido de este tema. 
Una vez las tengas, busca al sacerdote de tu parroquia y pídele que te aclare esas preguntas. 
Así entre más claro tengas este tema, te irás preparando de la mejor manera para vivir tu Sacramento de la Reconciliación. 



5. CELEBREMOS NUESTRA FE:


En el silencio de tu corazón, realiza una oración a Dios. En ella pídele que te mermita tener la virtud de la sinceridad para que puedas preparar tu examen de conciencia y con valentía poder confesarle a Él por medio de su sacerdote todos tus pecados. Habla con tu Padre Dios que Él te escucha. 



6. NUESTRO PEQUEÑO TALLER:


A través de un dibujo representa cada uno de los pasos para una buena confesión. Nota: Envíale foto de ese dibujo a tu catequista. 



Bendecida semana para todos. 

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