CONSAGRADOS PARA SER TESTIGOS. Confirmación. Tema #10

 TEMA #10. MARÍA TESTIGO FIEL



Llegaremos a la meta:


A medida que avances en este encuentro podrás ir comprendiendo: 1)qué significa la Santísima Virgen María para la vida de la Iglesia; 2) que la presencia de María es signo de fecundidad y de entrega; 3) que al confirmarse como cristianos dicen sí con María al amor de Dios. 

Cantemos:



Oremos:

Ven Espíritu Santo, llena nuestros corazones y enciende en nosotros el fuego de tu amor. Envíanos Señor tu Espíritu de fe... Y las cosas serán creadas y renovarás la faz de la tierra. Oh Dios que has dado a María una fe tan comprometida con las situaciones de su pueblo y con un corazón lleno de amor hacia sus hijos, concédenos también a nosotros una fe viva y dinámica como la de María nuestra Madre, para que seamos capaces de responder a los desafíos que nos presenta el mundo de hoy. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor. Amén. 


1. EN SINTONÍA:


Vas a entrevistar a tus familiares, amigos, vecinos, compañeros sobre ¿Qué advocación de la Virgen María conocen? Por ejemplo dirán: La Virgen del Carmen, La guadalupana, etc. Reúne por lo menos 10 advocaciones. 
pregúntales también qué saben de esa advocación y por qué les gusta. 
Recuérdales que sólo hay una Virgen María, nuestra madre; sino que cada país o región la representa con algo característico, y a esa representación se le llama advocación. No es que tengamos muchas vírgenes Marías, No, La Madre de Dios y Madre nuestra es solamente UNA. 


2. ESCUCHEMOS A DIOS:


Busca en tu Sagrada Escritura el EVANGELIO DE LUCAS 1, 26-38. Léelo atentamente y luego responde: 
  • ¿A quién envió Dios a Nazareth? 
  • ¿A quién visitó el Ángel y qué le dijo?
  • ¿Cómo reaccionó María?
  • Qué le explicó el Ángel?
  • ¿Qué respondió María?
Complementa lo anterior con este vídeo:



3. PARA PROFUNDIZAR: 


La Santísima Virgen María es el emblema más revelador, más apropiado y más hermoso del Espíritu Santo, porque el Espíritu Santo es amor y María es amor. El Espíritu Santo de la misma manera que guio a  Jesús, guio a María a lo largo de toda su vida, especialmente en los momentos más sobresalientes de su existencia. 

La Santísima Virgen es llena del Espíritu Santo

Desde el mismo momento de su Inmaculada Concepción, en donde Dios la acogió como templo predilecto, la colmó de su gracia, evitando que la menor mancha de pecado la tocara. Ante todo, en el momento de la Anunciación, cuando Dios la cubrió con su sombra, para hacerla fecunda y convertirla en Madre de Dios, sostenida e inspirada por el Espíritu Santo dijo libremente SÍ a Dios y aceptó ser la Madre del Verbo. Ella impulsada por el Espíritu se convierte en mensajera de buenas noticias, e iluminada por Él proclama el Magníficat, que es la expresión más profunda de su fe. 

El Espíritu Santo es el gran educador y santificador de cada cristiano. Con sus gracias y dones divinos nos va madurando y transformando en hombres nuevos, reflejos de Cristo, a lo largo de toda nuestra vida. María es nuestra Madre y Educadora que con sus gracias y dones divinos nos lleva de la mano hacia su Hijo Jesús. El Espíritu Santo es el gran vivificador que renueva e inspira permanentemente a los hombres y a las comunidades. María como auténtica Madre nos anima y alienta en cada momento. El Espíritu Divino es el gran unificador, el vínculo de unidad de la Iglesia y de las comunidades cristianas. Como buena Madre, la Virgen tiene también la misión de unir y congregar su familia, que es ls Iglesia. 

María, obra del Espíritu Santo. Ella durante toda su vida terrena, está totalmente bajo la influencia y la conducción del Espíritu Divino. Por eso podemos admirar en María todas las virtudes y los valores cristianos. Ella es la TESTIGO FIEL DE DIOS, que Él nos regala, para entregarnos con confianza en las manos del Espíritu Santo. 

¿Quién es María?

Una criatura humana, la más bella, la más perfecta, pero creada por Dios. Es una criatura bendecida por Dios y escogida por Él para hacerla su propia Madre; así también tenemos que Ella es la Madre de Dios, porque es la Madre de Jesús y Jesús es Dios; y es también Madre nuestra porque nosotros somos hermanos de Jesús; por eso nos protege, nos ayuda, nos aconseja como a Jesús. 

La vida de María no puede separarse de la vida de la humanidad creyente. Ella, una mujer de pueblo, nacida y realizada en un ambiente concreto y en una situación difícil para su país. María es un ejemplo no sólo para las mujeres, sino para todos los jóvenes que como ella desean dar respuesta responsable y consciente al llamado de Dios. 

El Evangelio nos muestra a María como una mujer comprometida con las situaciones de su gente y dispuesta siempre a compartir con todos. Es una mujer que actúa movida por el amor y la solidaridad. Ella no es una mujer pasiva que acepta todo sin más, al contrario, cuando no entiende las cosas pide explicaciones. 

El Cántico de María

"... Es a la vez el Cántico de la Madre de Dios y de la Iglesia... cántico del nuevo pueblo de Dios, cántico de acción de gracias por la plenitud de las gracias derramadas... cántico de los pobres cuya esperanza ha sido colmada con el cumplimiento de las promesas hechas a nuestros padres en favor de Abrahán y su descendencia por siempre. La  oración de la Virgen María, en su Fiat y en su Magníficat, se caracteriza por la ofrenda generosa de todo su ser en la fe" 

Me felicitarán..

El cumplimiento de estas palabras de María se ha dado a través de la historia de la Iglesia, pues siempre ha existido un culto especial para ella, este culto se intensificó gradualmente desde el Concilio de Éfeso (año 431). El culto a María no es adoración; una cosa es venerar y otra muy distinta es adorar. Solo se adora a Dios; a la Virgen la amamos y le rendimos un culto porque el Todopoderoso realizó en ella obras grandes, y porque ella supo responder a Dios como ninguna otra criatura. 

En la historia de nuestra salvación han intervenido muchas mujeres: Eva, Sara, Rut, Ester, Judith, Isabel, María; de todas ellas la más grande es sin duda alguna María, la Madre de Dios y Madre nuestra. Ella viene anunciada desde el Antiguo Testamento. Sobresale entre los pobre de Yahvé que llenos de confianza, esperan y reciben de Él la salvación. Con ella se cumple la plenitud de los tiempos y el Hijo de Dios toma de ella su naturaleza humana. "Dios Padre la eligió desde toda la eternidad como Madre Santísima, y el Espíritu Santo la adornó con singulares dones a nadie más concedidos". 

La historia de Colombia como de otros países latinoamericanos está inseparablemente unida a la figura de María, Madre de Dios, es así como muchas poblaciones llevan su nombre bajo alguna advocación. Son muchos los santuarios dedicados a la Virgen María. 

María camina con nosotros

Del mismo modo como el Espíritu Santo guio a Jesús, a María y a todos aquellos que aceptaron el "sígueme" de Jesús, continua hoy guiándonos en la marcha hacia el encuentro definitivo con el Padre. Y junto a nosotros, como en los inicios de la Iglesia, camina y acompaña para recibir la plenitud del Espíritu Santo. 

Para nosotros jóvenes que nos preparamos a recibir la fuerza del Espíritu Santo, María es modelo, modelo de discípulo, modelo del cristiano. En ella aprendemos a ser dóciles a la acción del Espíritu Sato, a hacer lo que Jesús nos diga, a ser felices porque la Palabra se hace vida y a aceptar el dolor con la fortaleza de María al pie de la Cruz. 

Termina esta reflexión con el siguiente vídeo:





4. ACTUEMOS:


Queremos que vivas al amparo de María para que ella interceda por ti ante nuestro Señor; por eso te invitamos a que tú también te apropies de una advocación de la Santísima Virgen. Puede que ya tengas tu advocación favorita (por ejemplo la Virgen del Carmen), pero si aún no la tienes, analiza con cuál de todas las advocaciones de María te familiarizas más, y te vamos a pedir que averigües de esa advocación lo siguiente:
  • Historia. 
  • De dónde es. 
  • De quién es Patrona. 
  • Por qué es importante para ese lugar. 
  • Qué características presenta su apariencia física y vestidos. 
Nota: Envía fotos de eso que investigaste a tu catequista. 



5. CELEBREMOS NUESTRA FE:


Te invitamos para que la siguiente oración si no te la sabes la puedas aprender de memoria, para que con ella Honremos a Dios a través de María.

Dios te salve Reina y Madre, Madre de Misericordia,
vida, dulzura y esperanza nuestra; Dios te salve. 
A ti clamamos los desterrados hijos de Eva;
A ti suplicamos gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. 
Ea pues, Señora Abogada nuestra, 
vuelve a nosotros tus ojos misericordiosos 
y después de este destierro, muéstranos a Jesús,
fruto bendito de tu vientre. 
Oh clemente, Oh piadosa, Oh dulce virgen María.
Ruega por nosotros Santa Madre de Dios,
para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Cristo nuestro Señor.
Amén.



6. MANOS A LA OBRA:


María es una mujer de muchas virtudes que el Espíritu Santo le dio para que fuera la elegida de Dios. Por eso vas a escribir en diferentes papelitos las virtudes de María según lo leído en el punto 3 de esta catequesis y vas a distribuir entre tus familiares, vecinos y amigos esos papelitos, de tal manera que todos puedan vivir las virtudes de María. 



Buena semana para todos. 

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