DIOS NOS AMA. Tema #27. Primera Comunión

 TEMA #27. NUESTRO PACTO DE AMOR CON DIOS



Hoy nos proponemos:


Reconocer que en Cristo se realizó la Nueva y Eterna Alianza entre Dios y la humanidad, Alianza a la cual nosotros como niños y niñas estamos llamados a seguir, respetar y honrar con nuestro amor sincero y único a Dios. 

Comencemos cantando:






1. MIRAMOS NUESTRA VIDA:


Te vamos a dejar tres frases, las cuales queremos que las recortes, para hacer de cada una de ellas un rompecabezas. Luego a tres personas de tu casa, le vas a pasar un rompecabezas para que arme la frase. Una vez armada la frase, les vas a preguntar ¿Qué significa esa frase para su vida?

  • Dios cumplió las promesas hechas en el Antiguo Testamento.
  • Cristo nos mostró con su vida que la Alianza tiene un solo mandamiento: el amor. 
  • La muerte en la Cruz es la realización plena del Reino de Dios en el sello de la Nueva y Eterna Alianza. 


2. ESCUCHEMOS A DIOS:


Busca en tu Sagrada Escritura LA CARTA A LOS HEBREOS 9, 11-20. Léela atentamente y luego responde: 

  • ¿De quién habla el texto?
  • ¿Cómo es la Alianza de Dios con la humanidad?
  • ¿Cuáles son las palabras que decía Moisés cuando rociaba al pueblo?
  • ¿Cómo reflejas ese texto en tu vida?
El texto nos enseña a reconocer y alabar a Dios en la persona de su Hijo Jesús y de su amor, hagámoslo con esta canción:




3. GUARDAMOS EN EL CORAZÓN:


El pueblo de Israel había conocido la Alianza que Dios había establecido con Noé: "Yo hago una alianza con ustedes y con sus descendientes", con Abrahán: "Yo haré una alianza contigo, haré que te multipliques sin medida"; con Moisés: "si quieren obedecerme y guardar mi alianza, serán mi propiedad entre todos los pueblos". 

las alianzas ayudaron a Israel en los momentos más difíciles como algo gratuito y beneficioso para ellos: protección, perdón, liberación, misericordia de Dios. Todas estas alianzas son un símbolo y un anticipo de la nueva y plena Alianza que Cristo nos revela. Una Alianza sellada con la Sangre del Hijo Único de Dios, derramada para la salvación, el perdón de los pecados, y la liberación de los hombres. 

Jesús es el nuevo Abrahán, padre de un pueblo en el cual todas las naciones son bendecidas. es el nuevo Moisés que nos libera de la esclavitud del pecado, del odio, del egoísmo y de la muerte, al darnos la resurrección. 

Cristo es el mediador entre Dios y los hombres, porque la sangre que derramó en la Cruz es la Sangre de la Alianza Nueva y Eterna; es el nuevo templo y nuevo sacerdote que ofrece su vida por la salvación de los hombres. 

Jesús nos da una nueva ley: "amaos los unos a los otros como yo los he amado". Es el Dios con nosotros ayudándonos, orientándonos, salvándonos, dándonos vida". 

Jesús es el Salvador de los hombres, con su Muerte y Resurrección realiza el Misterio de la Salvación de Dios. La mayor expresión de amor es el perdón y Cristo en la Cruz revela plenamente el amor y el perdón: "Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen". 

La Resurrección de Jesús se nos presenta como fuente de una nueva vida. Una vida que traspasa nuestra concepción del tiempo y del espacio. La presencia del Resucitado en su Espíritu será la fuerza que mueve a los discípulos desde Pentecostés. Un Resucitado que amplía su presencia en las pequeñas comunidades que profesan y celebran su fe. 

Cristo el Señor Resucitó, su amor fue más fuerte que la muerte. Con la siguiente canción, terminemos esta reflexión: 





4. MI COMPROMISO: 


En la siguiente imagen puedes colorear, resolver el laberinto y descubrir la frase que ayude a Pedro y Juan a llegar al Sepulcro.. Una vez hayas hecho esas acciones, plantea tu compromiso con Dios. 


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5. HABLAMOS CON JESÚS:


Te invitamos a que escribas tu oración personal, donde te comprometas a seguir de la mano de Dios en el camino de la vida. Busca que tus palabras en esa oración sean sinceras y con amor. 


6. CON TU FAMILIA:


Busca a tu familia ya sean en la mañana o en la noche, e invítalos para que entre todos (ojalá todos los días) recen la siguiente oración de abandono: 

Divino Corazón de Jesús:
tuyos somos, tuyos queremos ser, 
humildemente postrados ante su sagrada imagen,
consagramos nuestras personas,
nuestros seres queridos, amigos, 
con todo lo que somos y tenemos. 

Reina en nuestra casa, 
como en un hogar que te pertenece,
y no permitas que te sea arrebatado, 
lo que con todo el corazón te hemos consagrado. 
Derrama amorosamente sobre nosotros más bendiciones. Amén. 



Una semana bendecida por Dios para ustedes. 


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